Las Soledades de Luis de Gongora Argote

Soledades page 11

  1. "¡oh bienaventurado
  2. albergue a cualquier hora!"
  3. No pues de aquella tierra, engendradora
  4. más de fierezas que de cortesía,
  5. la gente parecia
  6. que hospedó al forastero
  7. con pecho igual de aquel candor primer,
  8. que en las selves contento,
  9. tienda el fresno le dio, el robre alimento.
  10. Limpio sayal, en vez de blanco lino,
  11. cubrió el cuadrado pino,
  12. y en boj, aunque rebelde, a quien el torno
  13. forma elegante dió sin culto adorno,
  14. leche que exprimir vió la Alba aquel dia,
  15. mientras perdian con ella
  16. los blancos lilios de su frente bella,
  17. gruesa le dan y fría,
  18. impenetrable casi a la cuchara,
  19. del sabio Alcimedón invención rara.

Commentary

Dámaso Alonso

Line 134 - 153
¡Oh albergue, oh refugio feliz en cualquier hora!
136
No parecía, a decir verdad, ser natural de aquellos montes (que mejor pudieran engendrar fierezas que cortesías) la gente que hospedó al forastero con aquel mismo espíritu de sencillez y de candor que tenía el hombre en la edad dorada, cuando los fresnos le servían de tienda y las bellotas eran su alimento.
143
Pusieron como mesa un cuadrado tronco de pine, cubierto, no de blancos manteles, sine de un áspero aunque limpio sayal; y en un trozo de boj (al cual el torno había dado, a pesar de su dureza, forma de cuenco, sumamente sencilla, pero elegante) le dan leche ordeñada aquella mañana, muy fría, y tan blanca, que los lirios de la frente del Alba desmerecieron en blancor junto a ella, y tan gruesa, que era casi impenetrable a la cuchara, extraña obra del viejo Alcimedonte.
153
También le sirven, en rojizos hilos como de finagrana, cecina de macho cabrío: de un macho cabrio que había sido durante casi cinco años esposo de más de dos cientas cabras, tan atrevido que jamás perdonó racimo su diente, aunque estuviese coronando la misma frente de Baco (y menos aun si el racimo estaba simplemente en lasvides), macho al que el Amor coronó siempre como vencedor en los combates que por celos y a testarazos mantienen unos cabrones con otros, hasta que se presentó un rival joven, de poca barbilla, de cuerno no muy duro, que le venció, librando asi con la muerte del viejo tantas vides como éste aún hubiera podido desmochar. 163 Después se tiende nuestro joven sobre un lecho de corchos cubierto de blandas pieles que le facilitan un sueño más regalado que el del príncipe que duerme entre sábanas de Holanda, púrpura de Tiro o brocado milanés. No ha bebido vinos anejos que puedan agravar su dormir con pesadillas afanosas, con ensueños de poder que le hagan verse (como al Sísifo mitológico, que fué condenado a subir eternamente un enorme peñasco a una altísima montaña) subiendo con ansia la cuesta de la ambición, ni que cuando parece que está ya en la cumbre 5, el despertar le traiga a lo real, y quede burlado del mismo peso de su desmoronada vanagloria. Ni fué su sueño interrumpido por el estruendo de trompa militar o por el son de destempladas cajas, sino sólo por el perro que entre las tinieblas de lanoche ladraba enfurecido contra la hoja seca que el viento arrancó de algún roble.
176
Durmió, por tanto, y se despierta sólo cuando las aves (como dulces esquilas de pluma sonora) empezaron a dar con sus voces señales del alba al Sol, el cual, asi avisado, salió del mar, que es su lecho de espuma, y rayó de luz la cabaña, verde obelisco de retamas y roble.

Salcedo Coronel

Primera Soledad Line 147
on milk: Pondera la blancura de la leche con más felicidad que Ovidio, lib.13., Met...Porque dize que los lilios blancos de la hermosa frente del Alba perdían junto a ella su blancura, quedaban inferiores a lo cándido de la leche, quando la ordeñaban.

Analysis

line 136
Some texts carry No pues de aquella sierra, a reading that is difficult to sustain in the context of a praise of the country. Aquella tierra referring to the Corte makes more sense. But a reading with the variant can be justified; see Dámaso Alonso.
line 140
the references point to the ideal past time, the Golden Age, when habitation and food were at hand, provided by nature (el fresno and el robre).
line 143
Coarse, clean cloth, not white linen, covered the pinewood table(for rough peasant cloth often suggests a morally superior way of life, as Donegal tweeds meant for the Irish poet - I mean Yates).
line 145
And he drinks milk out of a crooked and plain bowl (for true craftsmanship eschews perfect symmetry) made of boxwood which had rebelled against the lathe, yet had produced an elegant product). So thick is the cream on the milk that a spoon is needed, which leads the poet to ackowledge the debt we owe to the inventor of the spoon.